sábado, 14 de diciembre de 2013

EL CHAKRA LARÍNGEO



El quinto centro está situado en la garganta y tiene diez y seis radios correspondientes a otras tantas modalidades de la energía. Aunque hay bastante azul en su color, el tono predominante es el argéntico brillante, parecido al fulgor de la luz de la luna cuando riela en el mar. En sus radios predominan alternativamente el azul y el verde.

Se halla asociado a la toma de responsabilidad en las necesidades propias. El recién nacido se acerca al pecho, pero deberá mamar antes de lograr nutrirse. Idéntico principio es aplicable a lo largo de toda la vida. A medida que la persona madura, la satisfacción de sus necesidades depende cada vez más de sí misma. El funcionamiento de este chakra es apropiado cuando se alcanza la madurez y dejamos de culpar a los demás de nuestras propias carencias vitales y nos decidimos a crear lo que necesitamos y deseamos.
Este centro muestra también cuál es el estado de la persona al recibir lo que le llega. Si se mide el centro como contrario a las agujas del reloj, la persona no toma lo que se le da.
Esto se suele asociar con una imagen de lo primero que le llega. Es decir, si la persona considera que el mundo es un lugar negativo y generalmente hostil, será cauta y sus esperanzas sobre lo que haya de recibir serán negativas. Seguramente espera hostilidad, violencia o humillación en vez de amor y alimento. Como la negatividad de sus esperanzas le hacen crear un campo de fuerza negativo, atraerá hacia sí lo negativo. Es decir, si tiene expectativas de violencia, ésta se encontrará en su interior, atrayéndola según la ley de que los iguales se atraen, como se explicó en el capítulo 6 en relación con la naturaleza del campo energético universal.
Cuando la persona abre su centro de la garganta, va atrayendo gradualmente más alimento, hasta que sea capaz de recibir tanto que le permita mantener dicho centro abierto la mayor parte del tiempo. Entre tanto, poco después de haber abierto el centro, puede atraer algo negativo a causa de su convicción de que eso es lo que ha de llegar. Cuando sea capaz de pasar por esta experiencia, conectar con la causa original en su interior y hallar de nuevo la propia confianza reabrirá su centro de la garganta. Este proceso de apertura y cierre se prolonga hasta que las concepciones erróneas sobre recibir o tomar se transforman en confianza en un universo
nutritivo y benigno.
El aspecto de asimilación que se produce en la parte posterior del quinto chakra (5B), denominado a veces el centro profesional, está asociado con la sensación del yo de la persona con respecto a la sociedad, a su profesión y a sus iguales. Si una persona no se siente cómoda en este área de su vida, puede que su disconformidad se cubra de orgullo para compensar la falta de la propia estimación.
El centro de la parte posterior del cuello se abre normalmente Cuando uno tiene éxito y se adapta bien en su trabajo, además de sentirse satisfecho con éste al considerarlo como su tarea en la vida. Si la persona ha elegido una profesión excitante y que al mismo tiempo le permite realizarse, y si entrega lo mejor de sí a su trabajo, este centro estará en plena floración. Tendrá éxito profesional y recibirá de su universo el apoyo para nutrirse. Si no es éste el caso, la persona se mostrará reacia a dar lo mejor de sí. Fracasará y ocultará en el orgullo su falta de éxito. «Sabe» en su interior que saldría beneficiado si diera lo mejor de sí mismo o si encontrara un puesto de trabajo más exigente. Sin embargo, nunca hace ninguna de estas cosas y mantiene la defensa de su orgullo para evitar la desesperación real que subyace en él. Sabe que, en realidad, no tiene éxito en la vida. Probablemente interpretará el papel de víctima, quejándose de que la vida no le ha dado oportunidades para permitirle desarrollar su gran talento. Cuando se libere de este orgullo, con él desaparecerán el dolor y la desesperación.
En este centro desvelaremos, además, el miedo al fracaso que bloquea el impulso de salir y crear lo que tanto se desea, lo cual es aplicable, además, a las amistades personales y a la vida social en general. Al rehuir el contacto, esta persona también evita revelarse a sí misma y sentir, por una parte, el temor de no gustar y, por otra, la competencia y el orgullo expresados como «soy mejor que tú, no eres lo bastante bueno para mí».
Como nuestros sentimientos de rechazo se originan en el interior y los proyectamos luego hacia los demás, evitamos a la otra persona para ahorrarnos el rechazo. Afrontar el riesgo de buscar la profesión que se desea, avanzar hacia los contactos que se añoran y revelar los propios sentimientos al respecto son formas de liberar estos sentimientos y, por tanto, de abrir este chakra.